El concejo sanlorencino aprobó anoche, con siete votos positivos, una normativa que intenta quitar a estos trabajadores informales de las calles.
El Concejo Municipal de la ciudad de San Lorenzo aprobó este lunes por la noche la prohibición de “la actividad en la vía pública de cuidado de vehículos y/o cuidacoches, servicios de limpieza o lavado de vidrios y toda actividad de similares características” en las calles de este municipio.
La ordenanza fue efectivizada con siete votos a favor sobre ocho. De este modo, se establece una serie de penalidades para quienes incurran en esta contravención, justificadas mediante las leyes provinciales N°10.703 y N°13.744.
A su vez, el artículo primero de la ordenanza establece multas de entre 10 a 200 unidades fijas, más la “realización de tareas educativas”, a quienes realicen “actos extorsivos y/o cualquier otra manera se arrogue preferencias de uso sobre la calzada o parte de la misma sin autorización”.
Si bien no reviste esta falta a un delito penal, el trapito o limpiavidrios que sea “demorado” en esta situación deberá ser inscripto en “programas de capacitación, cursos y talleres para desarrollar habilidades y competencias que faciliten su inserción en el mercado laboral formal”.
Estos estarían organizados por la Subsecretaría de Cultura municipal, y destinados únicamente a aquellos que residan en la ciudad de San Lorenzo.