Newell’s comienza un nuevo ciclo con la necesidad de enterrar recuerdos recientes incómodos y de empezar a establecer mojones de despegue que permitan creer en sueños posibles. Tras la dolorosa decepción del proceso precedente se enfrenta ante la inevitable obligación de levantar la cabeza, de reconstruir sus ambiciones, y de recuperar sus ansias de protagonismo. En ese marco, el encuentro de este jueves, a las 21.15, ante Central Córdoba en Santiago del Estero, por la 1ª fecha de la Copa de la Liga, representa una extraordinaria oportunidad de hacer borrón y cuenta nueva, de arrancar todo desde cero, y de sepultar cuentas pendientes para liberar esta instancia de partida.
El partido se disputará en el estadio Alfredo Terrera ya que el Madre de Ciudades por ahora no puede ser utilizado por trabajos en el campo de juego. Ese cambio de sede, en un reducto de dimensiones más pequeñas, seguramente influirá en el desarrollo del trámite.
Ante el rotundo fracaso de Gabriel Heinze, la dirigencia rojinegra apuntó en otra dirección y fueron por otras formas (más sencillas, participativas y abiertas) para poder establecer bases confiables para una nueva etapa. Al frente de ese liderazgo futbolístico se designó al técnico uruguayo Mauricio Larriera, quien tendrá ante el ferroviario la chance de empezar a mostrar al menos algunos esbozos de los lineamientos que pretende implementar.
Solo con tres refuerzos arribados (los mediocampistas Franco Díaz de Platense y Ever Banega de Al Shabab de Arabia Saudita , y el centrodelantero uruguayo Juan Ignacio Ramírez de Nacional), Newell’s tratará de conseguir un buen resultado de esta excursión inicial.
El nuevo DT y sus colaboradores tendrán que esperar hasta último momento para saber si puede disponer de Banega y el Colo Ramírez, los últimos en llegar al Parque, quienes aguardan por la llegada de los tranfers de habilitación. Si aparece ese guiño favorable, desde el cuerpo técnico leproso tienen intenciones de ubicar estas dos piezas de gran valor ante la chance de ser titulares.
Y si no aparecen esas aprobaciones, lo más probables es que a Banega lo reemplace Esteban Fernández, el volante que viene de la reserva de River y tuvo muy poco rodaje en el semestre anterior, pero Larriera lo tiene bien considerado. Y otra alternativa sería Jerónimo Cacciabue.
Y si no surge la habilitación del Colo Ramírez, todo indica que su compatriota Guillermo May podría ser su primera opción.
En tanto, una de las grandes batallas dentro del plantel rojinegro se focalizó en el arco. En un escenario de gran puja y competencia interna asoma el duelo entre los arqueros Ramiro Macagno y Lucas Hoyos. En Santiago del Estero, Mauricio Larriera comenzará a exhibir sus preferencias iniciales y bajo los tres palos saldrá a escena una de las grandes revelaciones de este ciclo que comienza a andar.
Si repite el sistema que mejor le resultó en los amistosos en Uruguay, el DT apostaría por un 4-1-4-1 que le permitiría jugar con un esquema que ya puso en práctica y funcionó bien, sobre todo contra Peñarol.
La probable formación todavía navega entre signos de interrogación ya que Larriera no confirmó los once de arranque, ni siquiera después del ensayo de este miércoles por la tarde en el estadio de Mitre de Santiago del Estero.
Ante este panorama, Newell’s visitará a Central Córdoba de Santiago del Estero con la necesidad de empezar a gestar algo propio, que le permita desatarse para volver a intentar, sincerarse para volver a confiar, y decidirse para volver a creer que puede ser protagonista de todo lo que dispute en esta temporada.
Se lo debe a sí mismo…