El senador sanlorencino por la provincia es uno de los 72 votos que repartirá la sanción o no de la Ley Bases, cuyas críticas más vehementes vinieron desde el sindicalismo del Cordón Industrial. Por Santiago Ríos
Eduardo Galaretto es uno de los tres senadores nacionales por la provincia de Santa Fe, cuyo voto será de vital importancia para el “poroteo” que el Gobierno Nacional hace hoy con respecto a la aprobación de la Ley Bases, la cual obtuvo recientemente la media sanción por parte de la Cámara de Diputados de la Nación.
Al día de hoy, el senador afronta una disyuntiva a su posición con respecto a su hipotético voto, el cual se divide entre la representación ideológica y la crítica sindical hacia este proyecto de ley. Fueron estos sindicatos los que pararon casi la totalidad de las terminales industriales del Cordón Industrial, uno de los sectores productivos más relevantes de la República Argentina, en un claro rechazo a la reforma laboral y principalmente, al retorno del impuesto a las ganancias.
Los diputados y senadores, en el sistema democrático representativo, se dividen la representación del Congreso entre los partidos políticos en la primera, y la voluntad de las provincias y sus gobiernos locales en la otra. Conceptos de Formación Ética y Ciudadana de nivel de escuela secundaria.
De la teoría a la práctica hay una infinidad de variables, y la posición de los tres senadores santafesinos responda, seguramente, a cuestiones partidarias.
En la oposición a la Ley Bases, en principio, se ubicaría el rosarino Marcelo Lewandowski. Como parte todavía del frente Unión por la Patria, su voto coincidiría con la de su bloque tanto en la cámara alta como con la de sus aliados políticos en Diputados.
En las antípodas, su coterranea, Carolina Losada, acompañaría al frente del PRO por el sí a la ley, bloque que también estará bajo la mirada del ex presidente Mauricio Macri, quien detrás de escena sigue dando influencia al gobierno nacional.
En el medio, Eduardo Galaretto. Si sigue la elección de su bloque daría el voto positivo, pero detrás, hay un amplio sector de la representación gremial sanlorencina que reclamó vehementemente por el rechazo de la ley, debido a las implicancias y cambios sustanciales que generaría la aprobación de la misma en las leyes laborales que injieren en la región.
La disyuntiva es si oirá o no los reclamos de parte de una sociedad a la que responde como miembro del Congreso de la Nación. Claro que, en contrapartida, tiene la posibilidad de seguir la voluntad partidaria y también la postura de de un gobernador que coincide más de lo que disiente con Milei, lo que aliviana la posición del médico sanlorencino.
Hoy, los distintos sectores de la población reclaman una postura a favor de los intereses de las localidades y regiones de donde surgen los políticos que representan a la ciudadanía. El voto del sanlorencino tiene suma importancia en las cuentas que realizan desde el Gobierno Nacional para conocer si sale o no sale la ley. Será cuestión de decidir.