Uno de los peores indicadores que lleva consigo el gobierno de Javier Milei es el valor real del salario, que en este 2024 alcanzó valores que se ubican en las cercanías de lo que fue el 2001.
Según un informe del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP) de la Universidad de Buenos Aires, el Salario Mínimo Vital y Móvil tuvo una caída de su poder adquisitivo del 32% durante el año que se fue.
El informe detalla que en términos reales, el salario mínimo, hoy valorizado en 271 dólares, está por debajo del nivel observado a finales del 2001, antes del colapso de la convertibilidad 1 a 1. Al día de hoy representa un 61% menos que su pico histórico en septiembre de 2011, cuando fue de 547 dólares (al cambio, 2300 pesos argentinos en ese entonces).
Estas cifras grafican las consecuencias tangibles de lo que es la política económica del Gobierno. Con el fin de ralentizar la escalada de la inflación y mermar la oferta de pesos, el resultado fue un importante retroceso del poder de compra del salario, expresado también en el 112% de aumento en los alimentos marcado por el IPC del INDEC.
El mismo informe de la UBA señala que desde el mes de noviembre de 2023, último oficial de la gestión de Alberto Fernández, se perdieron 183.000 puestos de trabajo. En agosto y septiembre de este año hubo una leve recuperación, pero la curva finalmente volvió a estancarse en el último tramo del 2024.
En lo que respecta a los últimos años, el empleo formal apenas se ubica en las cercanías de los valores del 2022 y se mantiene por debajo de todos los valores mensuales de 2023.